Privatización de algunos eventos 

Las Vallas

Al llegar a este punto de la feria de Cali se encuentra una diversidad de opiniones entre las personas que apoyan y las que no el hecho de “privatizar” la feria por medio del
establecimiento de vallas sobre la autopista suroriental, lugar por donde pasan los desfiles más importantes en el marco de la feria.
El establecimiento de las vallas ha generado división entre las personas desde el 2008, año en el cual se empezó esta practica, unas por un lado apelan al carácter público con el cual se creó la feria y aseguran que la mayoría de personas no cuenta con los recursos necesarios para comprar la boletería a la zona de gradería que cuenta alrededor de $180.000 y la cual permite ingresar a las actividades del salsódromo, el desfile de Cali viejo y el desfile de autos antiguos.
Algunas de los argumentos utilizados por corferias (organizador de la feria), parte de los asistentes y empresarios que patrocinan el evento a favor de esta privatización van dirigidos a garantizar la seguridad de los asistentes; ya que hay que tener en cuenta que a este tipo de actividades confluyen alrededor de 200.000 personas de las cuales 23.000 asisten a la localidad de gradería que es en donde se han implementado especialmente las vallas. Se hace
necesario el uso de estas para controlar el número de asistentes, evitar que personas se colen, sin estas el aforo excedería la capacidad de la estructura, se evitan situaciones incómodas como el manoseo por debajo de las gradas, el hurto de pertenencias y se facilita la requisa pertinente a los asistentes evitando el ingreso de alcohol, sustancias psicoactivas, armas de fuego o cortopunzantes.
cabe mencionar que la feria de Cali es un evento de carácter mixto, es decir que la entrada no se cobra para todas las actividades que se desarrollan, la última versión de la feria contó con 60 actividades de las cuales solo 3 tuvieron acceso restringido por medio de boletería actualmente la feria cuenta con una zona de 8000 metros cuadrados en los desfiles , destinados para las personas que no compran boletas.
Llegados a este punto es importante conocer las razones por las cuales se tomó la decisión de cerrar algunos espacios dentro de la feria ya que se tiende a seguir replicando los comentarios que hablan de la pérdida del sentido de la feria gracias a la privatización, la cual genera que ya no sea un evento del pueblo para el pueblo sino sólo con fines lucrativos, sin tener en cuenta que gran parte de los ingresos van destinados al pago de artistas como los bailarines y cantantes internacionales, a pesar de que la financiación es mixta, los ingresos de boletería se hacen necesarios para pagar las escuelas de baile que reciben alrededor de 14 a 22 millones dependiendo del número de bailarines.
A pesar de las posiciones encontradas, la privatización de algunas actividades de la feria ha generado un cambio negativo en la percepción que las personas tenían de la misma que cada vez se generaliza más.